[Momento Salud & “Beleza”] Foliculitis y “pelitos” enquistados. Cómo evitarlos?

La foliculitis es una patología de la piel que consiste en la inflamación y daño de uno o más folículos pilosos, secundaria a la aparición de un vello enquistado o encarnado que no pudo romper la epidermis para salir y comienza a crecer anormalmente en el interior, ocasionando erupciones (poco o muy dolorosas), acompañadas de prurito y a veces pústulas. 

Su aparición se asocia al bloqueo de folículos pilosos, por ejemplo por el uso de prendas ajustadas. También se relaciona con algunos métodos depilatorios, especialmente aquellos que retiran el vello desde la raíz, debilitando su crecimiento hacia el exterior.

A continuación encontrarás varios “tips” que usados en casos de foliculitis leves a moderada como la mía,  han proporcionado alivio.

Sin olvidar que cada organismo es diferente, la piel responde muy bien a las rutinas en casa para ayudar en la resolución de lesiones que ya tienes, atenuar el malestar y prevenir en la medida de lo posible los síntomas.

Y por favor, con “ojo crítico”, si tus lesiones son severas, antes de recurrir a un método casero es conveniente comenzar un tratamiento dermatológico y pensar en la posibilidad de realizar una depilación definitiva para acabar con el problema “de raíz”!!!


Durante el baño 

• Exfolia tu piel de 2 a 3 veces por semana. El exfoliante no necesariamente debe ser comprado. Puedes hacerlo tu misma, ya que  un producto natural puede ser tan eficaz como alguno comercial. Aprende aquí!!! 

• En áreas con tendencia de “pelitos” enquistados, realiza por algunos minutos movimientos circulares, presionando ligeramente la piel para evitar mayores irritaciones y lesiones. Masajear vigorosa y fuertemente el área no va a eliminar en un ratito este problema de la piel. Ya es suficiente tener foliculitis, no? :P Ten paciencia que progresivamente verás los resultados.

• Usa diariamente un guante exfoliante. No requiere el mismo tiempo que una “exfoliación en forma”, es solo pasarlo con tu jabón habitual como lo haces con la esponjita cuando tomas baño.

Y a la hora de depilar... 

Cuando sea posible, evita depilarte para mejorar la recuperación de la piel. Pero si no tienes otra salida:

• Asegúrate siempre que la piel está en perfectas condiciones de higiene. Lava muy bien el área ANTES y DESPUÉS, preferiblemente con jabón antibacterial.
• Alterna de método depilatorio y opta por la máquina desechable (lámina, cuchilla, rastrillo...), así tu pelo saldrá sin problemas, pues como mencioné anteriormente, los métodos depilatorios que eliminan el vello desde la raíz, favorecen la aparición de foliculitis. 

• Toma un baño calientito o coloca una toalla/compresa caliente en la zona a depilar y usa una máquina desechable nueva para facilitar el proceso. Teniendo en cuenta el punto anterior, la foliculitis no es exclusiva de pinzas, ceras y depiladoras eléctricas, ya que pasar la maquina desechable en dirección contraria del pelo también causa alteraciones en el crecimiento del mismo, desarrollándose enrollado debajo de la piel. Evita entonces rasurarte a contra pelo.

• Usa siempre crema de afeitar, crema Nivea o incluso, acondicionador que ayuda a deslizar la máquina fácilmente.
• Enjuaga bien.

Después  

• Dedica algunos minutos más para hidratar tu piel en la mañana y en la noche, principalmente en áreas “problema”. Las pieles resecas se vuelven ásperas y llenas de escamas, haciendo más difícil que el pelo atraviese la barrera de la piel para salir. Por este motivo las cremas y lociones más recomendadas son precisamente las más hidratantes como Dove nutrición intensiva, Nivea Body Milk o Cetaphil loción ultra humectante. 
• Los aceites naturales son otra opción para hidratar rápidamente. Elige cualquiera de ellos por ejemplo aceite de oliva, aceite de argán, aceite de almendras, etc. 
• A la hora de vestirte prefiere tejidos de algodón y fibras naturales que no tallen ni raspen la piel como encajes y lycras.

Pon en práctica estos consejos y tendrás resultados visibles en poco tiempo. Si por el contrario, no observas una evolución satisfactoria, recurre a un especialista.

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